-¿Qué estás buscando? -No lo sé, no lo encuentro, creo que, algo de mi pasado. - Pero, alguna especie, de, no sé, ¿Una foto? ¿Un amuleto? - No, la verdad, no sé qué busco, tal vez, el niño que llevaba dentro.
Y me olvidé, guardé mi pasado en un cajón, lo cerré y creció una nueva flor, en mi jardín, se ve el arco iris en blanco, negro y gris, aunque así está mi razón, solo quedaron estragos del amor que daba mi corazón, ¿y ahora qué queda de mi? No consigo un manual de auto-ayuda que me enseñé a cómo vivir, aunque sé resistir, y sufrir, no creo en dios, aunque ayer sí, pero es que desde que se fue mi abuela no noto su presencia, y pa' decir verdad, tampoco noto su ausencia, y hoy me pregunto ¿Dónde quedó mi maldita inocencia? Soy un niño que juega entre la realidad y el sueño, pero es que la realidad juega conmigo y con el tiempo, mejor vive el presente porque son solo momentos, ¿Mañana seguiré vivo? No lo sé, tal vez mañana el sol se convierta en frío, y yo caiga en un triste vacío, ¿o se acabe mi camino? Yo sólo quiero volver el tiempo atrás, viví senderos felices y senderos llenos de oscuridad, me convertí en un hombre, pero cuando creí que era todo, no soy nada, quedó escoria de mis alas, y es que el destino se las quedó como ella se quedó con mi mirada, el tiempo se robó al niño que llevaba dentro, ahora lo único que hago es llorar por mis sentimientos, ayer no me preocupaba ni por el mundo y ahora mejor vivir a pleno cada segundo, hoy tal vez soy el mejor y mañana terminaré siendo solo un vagabundo, ¿Y qué me queda? Qué me queda, si mis pies no tocan la tierra, mi mente vive en las nubes, eso sólo me queda de cuando era niño, mis ojos se cierran y mis sueños se cumplen, pero como arena formando un castillo, se destruyen, y ni la anestesia cura mis heridas que se transforman en grietas, ¡Que se pare la tierra, me quiero bajar! O que se pare el tiempo, estoy cansando de prosperar.
Ahora lo único que llevo dentro, es un corazón roto, sentimientos muertos, ilusiones de cristal y tristes recuerdos, aunque también quedan los felices, pero, quiero ser el niño de ayer, al que no le preocupaba nada y quería ser príncipe o rey, ¿Dónde quedó? Se fue desmoronando hasta que sintió, y vio, vio toda la realidad, y ahora qué hago si lo único que sueño es en que todo no sea tan así, en que por un momento, con ella pueda ser feliz, o en mi futuro, pero los malditos sueños duran minutos, segundos, y ahí vuelvo a empezar, y a esperar, y a sentir y hacerme la cabeza con miles de tristeza, y a llorar, y no parar.
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